Vol. 3
Nora Ephron
Emily Dickinson, "Hope is the thing with feathers"
Cuando no sé qué quiero o todo me parece un incordio, despunta una añoranza por lo conocido. Una rutina bien diseñada, perfectamente ejecutada, es un descanso. El diez de Nadia Comaneci, Orgullo y prejuicio, el documental de Joan Didion, “Hope is the thing with feathers”, las películas de Nora Ephron. Hay un baúl mental donde se guardan todas esas cosas que podríamos etiquetar “formas livianas de felicidad”.
Cuando Harry conoció a Sally es el epítome de lo reconfortante. La ropa de Sally con sus tejidos de cable, camisitas y pantalones tiro medio-alto (as it should), la forma en la que pide la comida, los comentarios sobre Casablanca, los arbolitos navideños arrastrados por la calle. Un plan de viernes, un plan de domingo, de vacaciones invernales; una solución. Las comfort-movies son en la repetición, su esplendor se magnifica cuando la atmósfera que crean es tan reconocible que uno se puede abandonar y flotar.
Un vestidito conveniente y elegante, cortado con un vuelo muy favorecedor, que se puede usar en el verano citadino de calor húmedo y asfixia y en cualquier otra estación con medias negras, con botas altas, con pantalón. Un lugar seguro, un comodín, una solución. Una descripción muy Nora Ephron, cuyas películas (las que escribió, las que dirigió) y libritos pueden resolver casi toda situación y rescatar a cualquiera de la soledad.
Cuando Harry conoció a Sally, Columbia Pictures, 1989