No 2
Ana Navajas
“Observé la naturaleza humana detrás de tazas de café espresso”
Sylvia Plath, The unabridged journals of Sylvia Plath
Ana Navajas dice que escribe sin rituales: en el celular y en cualquier lado, en una fiesta, en una sobremesa, en la fila del supermercado. Es posible imaginársela en un costadito, un poco aburrida, un poco displicente, atenta a las conversaciones de los demás, interesada en rescatar fragmentos curiosos de humanidad. Estás muy callada hoy (2019) es la historia de una mujer cuya madre ha muerto, que observa a sus hijos crecer, que escribe una tesis, que tiene una perra. La narradora captura el ritmo lento de las crisis y los ciclos con una sensibilidad desajustada del “concepto de felicidad de la gente común y corriente”, y pondera el tiempo, la tristeza y el amor con los ojos cargados de ácido.
Arrinconada y a la intemperie de su lucidez, construye — desde el placer por los segundos planos — una estética de la distancia, un humor seco; un lenguaje para apropiarse de sus emociones sin sentimentalismos: “Para cada uno de mis hijos armé un libro con fotos, anécdotas y recuerdos. A ellos les encanta mirarlo. Ahora voy a anotar en el de Pedro su primera desilusión”.
La vida se desenvuelve lenta y desganada y ella, en el margen, mira. “Todos siempre de aquí para allá y usted ahí, siempre ahí, siempre ahí. ¿Qué mira? ¿Nunca lo pensó? ¿Cuál es su deseo, Ana?”.
— Estás muy callada hoy, Buenos Aires, Rosa Iceberg, 2019
